Bitácora de vuelo
Día 557
¡ Oh ! También se pueden instalar rueditas en los pies. Mis papás dicen que se llaman patines. ¡ Estoy impresionado y tengo la boca abierta !
Aventuras de un pequeño gran saltamontes
Un blog amoroso para ahora, nuestros dos hijos
Bitácora de vuelo
¡ Oh ! También se pueden instalar rueditas en los pies. Mis papás dicen que se llaman patines. ¡ Estoy impresionado y tengo la boca abierta !
Confesiones de un padre
Querido hijo, estás dormido y aprovecho para mirarte mientras duermes en este mediodía, mentiría si te dijera que no me siento cansado, pero todo ese cansancio desaparece mágicamente mientras te veo y escucho tu respiración. Te veo tranquilo, hermoso y lleno de vida.
Eres mi inspiración, eres parte de mi corazón. Te quiero mucho.
Bitácora de vuelo
Después de la guardería, antes de llegar a casa fuimos al parque. Me divertí mucho. Llegamos a la casa y seguí jugando. Me dormí hasta las once y media de la noche. Traía mucha energía. Cambio y fuera.
Una linda vocecita
Quisiera contarles que el pequeño saltamontes está muy grande, aún es pequeño, pero si lo vieran, realmente pensarían que tiene más edad. De pronto, sus abuelitos nos comentan que actúa como un niño con mayor edad. Sí, es pequeño, aún no habla claramente, pero escucharlo es como tener a un lado a un pequeño periquito. Habla y habla, habla y habla. No le entendemos, pero sospechamos que cuando pueda hablar, será de esos niños pequeños que estará en comunicación con nosotros todo el día.
Ya llegará ese día, mientras tanto, disfrutaremos sus «conversaciones» y trataremos de adivinar qué es lo que desea, para poder ayudarle a que aprenda nuevas palabras.
¡ Estamos muy contentos con nuestros pequeño parlanchín !
Bitácora de vuelo
Mamá, ya estoy grande, yo puedo comer solito. Tú puedes comer de tu plato, yo como solito. Cambio y fuera.
Bitácora de vuelo
Ayer toqué el teclado de mis amiguitas. Me dijeron que sabía tocar muy bien.
Bitácora de vuelo
Día 549
Bienvenido Osito-Gorrión. Cambio y fuera.
Bitácora de vuelo
Mi abuelito dice que para cuidarme es necesario contratar a tres peones. Cambio y fuera
Confesiones de un padre
El día de hoy fue la primera vez que vi en su mirada, el temor, es más, un sentimiento que no pude interpretar.
A pesar de que es pequeño, es inteligente y fue necesario hablar seriamente con él porque su comportamiento dejó mucho que desear. Por primera vez, sentí como el corazón se me hacía pequeñito al verlo llorar.
¿ Quién dice que los padres no sufrimos también al verlos llorar?
Bitácora de vuelo
Me he dado cuenta del poder que tienen los berrinches. Estoy usándolos muy seguido. Cambio y fuera